Esta mañana, martes 24 de noviembre, hemos realizado el simulacro de incendio obligatorio de todos los años, evacuando a todo el alumnado y personal del centro mientras sonaba la alarma.
Como novedad, al utilizar este año dos edificios para clases nos hemos salido todos del colegio, quedándonos en la entrada y fuera de todo peligro.
Todo fue bien, como siempre, aunque habrá que corregir algunos "fallitos" pero para eso están estos "ensayos".
Esperamos no tener que repetirlo nunca en la realidad.